¡Ven, Espíritu de verdad!, Compañero de camino: confírmame en la fe para dar razón de mi esperanza. ¡ Ven, luz de Dios !
Guíame en esta búsqueda de ti mismo, para penetrar a fondo en tu designio amoroso sobre mi vida. Alumbra mi interior, pon alerta mi conciencia para que sepa elegir siempre lo mejor para tu gloria y para mi perfección.
Que sea como la Virgen, mi Madre: Virgen prudente y santa, que me deje guiar por tu consejo íntimo que me llevará a identificarme con Jesús, a tratar de que su Reino llegue a todos los hombres.
Dame el acierto y la seguridad de vivir en tu Verdad, que es el mayor gozo del corazón.
¡En ella descanso, Dios mío!
No hay comentarios:
Publicar un comentario