SANTA CLARA,
ICONO DE LA VIRGEN MARÍA
NOVENA
ORACIÓN
Oh Dios omnipotente, que con Santa Clara
hiciste resplandecer en tu Iglesia y en el mundo una nueva luz de santidad, haz
que su ejemplo e intercesión nos anime para que también nosotros seamos fieles
testigos de tu amantísimo Hijo. Por
Jesucristo nuestro Señor.
DÍA 1º
Del
Evangelio de San Lucas (1, 28.31)
“Alégrate, llena de gracia. El Señor está contigo. Concebirás y darás a
luz un hijo, al que pondrás por nombre Jesús”
REFLEXIÓN
Para el mundo Clara es una niña como otras, pero a los ojos de Dios, es
una joya que Él ha cuidado para sí. Clara encuentra en Francisco el amor
transformante de Dios, el Evangelio vivido y la antorcha que le precede en el
camino. Apenas comprende cuál es la voluntad de Dios, Clara está dispuesta.
Libre de toda atadura con la tierra, dice “sí” con los labios, con el corazón,
con el entusiasmo, para realizar el sueño más bello.
En la Anunciación el
arcángel Gabriel manifiesta a María la voluntad de Dios. Para Clara el ángel es
Francisco; el anuncio es el testimonio de vida.
DE LA LEYENDA DE SANTA CLARA
“El padre Francisco la exhorta al
desprecio del mundo; demostrándole con vivas expresiones la vanidad de la esperanza
y el engaño de los atractivos del siglo. Destila en su oído la dulzura de su
desposorio con Cristo, persuadiéndola a reservar la joya de la pureza virginal
para aquel bienaventurado Esposo, a quien el Amor hizo hombre”
Pidamos al
Señor por intercesión de Santa Clara,
las gracias que deseamos alcanzar en esta Novena.
las gracias que deseamos alcanzar en esta Novena.
Padrenuestro,
Ave María y Gloria
ORACIÓN
FINAL
¡Oh Virgen
prudente, Ángel de la Eucaristía,
Santa Clara de
Asís, mensajera de paz y amor!
Tú que en la
tierra fuiste dispensadora
de los tesoros
de la divina bondad,
atiende las
súplicas
que te
dirigimos en esta Novena,
y dígnate
acogerlas favorablemente
a mayor gloria
de Dios
y bien de
nuestras almas. Amén.
CANTO
Bello jardín
franciscano,
de flores
variadas y finas,
eres oh Clara
la rosa
que crece
lozana entre espinas.
Vida de Cristo
difundes
y embriagas
los siglos de aromas.
Miles de
vírgenes siguen
tu blanco
ideal de paloma.
¡Ave, seráfica
flor!
¡Ave,
eucarístico amor!
¡Ave seráfica
flor,
en el
jardín del Amor!
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