viernes, 19 de abril de 2013

¡SEÑOR, CONFÍO EN TI!



¡Señor, confío en Ti!
¿En qué se funda mi esperanza?
En el Amor de Dios manifestado plenamente en Jesucristo.
Y Jesús nos ama hasta el extremo de entregar su vida por nosotros en una Cruz.
Y este Amor exige una respuesta de amor.
Tú fuiste, Señor, el primero en amarme y en dejarme sentir tu Amor, para que yo te amara.
El primero en mirarme a los ojos y llamarme por mi nombre, para que te siguiera.
En medio de mi debilidad Tú has sido siempre mi Fortaleza.
Cuando me he sentido "nada! y convencido de que no soy NADA, Tú has sido para mí "Mi Todo".
¡Sí, Señor, confío en Ti!
porque eres mi Vida, mi Amor, mi Felicidad...
En los momentos de oscuridad y de cansancio, no estoy sola, Jesús sale a mi encuentro y me dice:
"No temas, confía"
Estas palabras de nuevo me devuelven el entusiasmo, la paz y la alegría
 para seguir siendo signo de esperanza en medio del mundo.

Vosotras y vosotros, jóvenes, que a veces no sabéis qué hacer o qué rumbo seguir:

Os sugiero: Entrad en una Iglesia, poneos delante de Cristo Crucificado -ya Resucitado-, dejaos interpelar por Él, y no tengáis miedo en seguirle.
Os aseguro que en Él encontraréis la Felicidad verdadera, la Paz plena y la Alegría desbordante.
Yo, desde mi clausura pediré para vosotros lo que pido para mí:
una Fe viva, una Esperanza fuerte y un Amor grande...

(Sor Mª Rosa Blanca de Getsemaní, osc)

No hay comentarios:

Publicar un comentario