"Jesús se retiró al monte de los Olivos. Al amanecer se presentó de nuevo en el templo, y todo el pueblo acudía a él, y, sentándose, les enseñaba. Los escribas y los fariseos le traen una mujer sorprendida en adulterio y, colocándola en medio, le dijeron: "Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. La ley de Moisés nos manda apedrear a las adúlteras; tú, ¿qué dices?". Le preguntaban esto para comprometerlo y poder acusarlo. Pero Jesús, inclinándose, escribía con el dedo en el suelo. Como insistían en preguntarle, se incorporó y les dijo: "El que esté sin pecado, que le tire la primera piedra". E inclinándose otra vez, siguió escribiendo. Ellos, al oirlo, se fueron escabullendo uno a uno, empezando por los más viejos. Y quedó solo Jesús, con la mujer, que seguía allí delante. Jesús se incorporó y le preguntó: "Mujer, ¿dónde están tus acusadores?; ¿ninguno te ha condenado?". Ella contestó: "Ninguno, Señor". Jesús dijo: "Tampoco yo te condeno. Anda y en adelante no peques más".
1.- LEE / ESCUCHA: ¿QUÉ TE DICE EL TEXTO?
Al amanecer, después de pasar la noche orando, escribas y fariseos someten a juicio de Jesús a una mujer sorprendida públicamente en adulterio, para tenderle una trampa: obligándole a pronunciarse o contra la ley de Moisés o contra el derecho romano. Jesús no dice nada. Ante la insistencia de los judíos, Jesús apela a la conciencia de los acusadores, que terminan por marcharse. Cuando quedan solos, Jesús perdona a la mujer y la invita a no pecar más.
Al amanecer, después de pasar la noche orando, escribas y fariseos someten a juicio de Jesús a una mujer sorprendida públicamente en adulterio, para tenderle una trampa: obligándole a pronunciarse o contra la ley de Moisés o contra el derecho romano. Jesús no dice nada. Ante la insistencia de los judíos, Jesús apela a la conciencia de los acusadores, que terminan por marcharse. Cuando quedan solos, Jesús perdona a la mujer y la invita a no pecar más.
2.- MEDITA / ASIMILA: ¿QUÉ TE DICE HOY LA PALABRA?
La bondad, la misericordia, el perdón y el amor de Jesús brillan en esta escena en contraste con la severidad, la crueldad y el odio de los acusadores que exigen se cumpla la condena. Jesús se compadece de la desgracia de esta mujer difamada, desprestigiada, cogida vergonzosamente en el pecado; y su bondad infinita la acoge y la libra de una muerte cruel. Se compadece de su inmensa miseria y soledad, de su arrepentimiento y de sus lágrimas y la perdona con misericordia infinita, levantándola con todo amor y animándola a emprender una vida nueva lejos del pecado.
La bondad, la misericordia, el perdón y el amor de Jesús brillan en esta escena en contraste con la severidad, la crueldad y el odio de los acusadores que exigen se cumpla la condena. Jesús se compadece de la desgracia de esta mujer difamada, desprestigiada, cogida vergonzosamente en el pecado; y su bondad infinita la acoge y la libra de una muerte cruel. Se compadece de su inmensa miseria y soledad, de su arrepentimiento y de sus lágrimas y la perdona con misericordia infinita, levantándola con todo amor y animándola a emprender una vida nueva lejos del pecado.
3.- ORA /CONTEMPLA: ¿QUÉ LE DICES AL SEÑOR CON LA PALABRA?
¡Oh Jesús! Me conmueve profundamente tu postura de indulgencia, perdón y comprensión sin límites; me abandono una vez más a ti con ilimitada confianza, dejando en tus manos toda mi vida. Sólo tú eres mi juez y mi liberación.
¡Gracias, Señor! Por tu Palabra llena de vida, que yo quiero tener presente en mis oídos y en mi corazón, Palabra llena de fuerza, que me alienta, que me ilumina, y me llena de alegría, perdón y paz.
¡Oh Jesús! Me conmueve profundamente tu postura de indulgencia, perdón y comprensión sin límites; me abandono una vez más a ti con ilimitada confianza, dejando en tus manos toda mi vida. Sólo tú eres mi juez y mi liberación.
¡Gracias, Señor! Por tu Palabra llena de vida, que yo quiero tener presente en mis oídos y en mi corazón, Palabra llena de fuerza, que me alienta, que me ilumina, y me llena de alegría, perdón y paz.
4.- PON EN PRÁCTICA / ANUNCIA: ¿QUÉ HACER CON LA PALABRA?
Quedan muy pocos días para la Pascua. Acudir al Sacramento de la Reconciliación (Penitencia), confesar nuestras faltas y pecados, dejarnos animar por Cristo, abrirnos a su Gracia, perdón y misericordia, y comenzar una nueva vida resucitada con Cristo Resucitado.
Quedan muy pocos días para la Pascua. Acudir al Sacramento de la Reconciliación (Penitencia), confesar nuestras faltas y pecados, dejarnos animar por Cristo, abrirnos a su Gracia, perdón y misericordia, y comenzar una nueva vida resucitada con Cristo Resucitado.
¡¡¡TE DOY GRACIAS, JESÚS MISERICORDIOSO, POR ESTE SAGRADO SACRAMENTO DE LA PENITENCIA QUE NOS HAS REGALADO PARA QUE,COMO LA MUJER ADÚLTERA, CONFIEMOS EN TU PALABRA, Y LLENOS DE TU AMOR INFINITO QUEDEMOS SANADOS!!!
ResponderEliminarQUE TODA NUESTRA VIDA SEA UN ESTAR ENDEUDADOS DE TU INFINITA MISERICORDIA Y QUE NO PERDAMOS NINGUNA OCASIÓN MÁS PARA DARTE LO QUE NOS PIDES...PORQUE SÓLO TÚ PUEDES DARNOS LA PAZ!
¡NO ME QUEDA MÁS REMEDIO QUE CONFIAR EN TI, Y DEJARME ACOGER POR TI, PORQUE TU PALABRA ME HA CURADO! ¡GRACIAS POR DARME UNA NUEVA VIDA CON TU PERDÓN!
¡¡¡violetita pulgarcina confía en TI!!!